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Tarta de queso con remolino de fresas: cremosa y afrutada

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Preparar la base:
Desmenuzar finamente las galletas de mantequilla (preferiblemente en una bolsa para congelador con un rodillo o en un robot de cocina).
Agrega la mantequilla derretida a las migas de galleta y mezcla bien.
Presione la mezcla en un molde desmontable forrado con papel de horno (diámetro aprox. 24 cm) y distribúyala uniformemente. Presione la base firmemente.
Dejar solidificar la base en el frigorífico.
Relleno de queso:
Coloque el queso crema en un tazón grande y revuelva hasta que quede suave.
Agrega el azúcar y el extracto de vainilla y mezcla bien.

Agrega los huevos uno a la vez y revuelve bien después de cada uno.
Finalmente, agregue la crème fraîche.
Salsa de fresas:
Coloca las fresas en una cacerola con el azúcar y el jugo de limón y cocina a fuego medio hasta que las fresas estén suaves.
Haga puré la mezcla y cuele a través de un colador fino para quitar las semillas.
Disuelva la maicena en agua y agregue a la mezcla de fresas.
Llevar a ebullición nuevamente brevemente hasta que la salsa espese. Dejar enfriar.
Armar:
Vierta la mitad del relleno de queso sobre la base preparada y alise.
Unte la mitad de la salsa de fresa encima en cucharadas.
Vierta el resto del relleno de queso encima y extiéndalo uniformemente.
Decora con cucharadas de la salsa de fresa restante.
Con un palillo o una brocheta, pase la salsa de fresa en espiral a través del relleno de queso para crear un patrón veteado.
Hornear:
Precalentar el horno a 160°C (calor superior/inferior).
Hornee la tarta de queso en el horno precalentado durante unos 50 a 60 minutos, hasta que los bordes estén firmes y el centro todavía se tambalee ligeramente.
Apague el horno y deje que el bizcocho se enfríe por completo con la puerta del horno ligeramente abierta.
Para servir:
Deje enfriar la tarta de queso en el frigorífico durante al menos 4 horas, preferiblemente durante la noche.
Antes de servir, afloje el borde del molde desmontable y transfiera el pastel a una fuente para servir.
Opcionalmente decora con fresas frescas y un toque de azúcar glass.
Consejos:
Utilice fresas frescas y maduras para obtener la mejor calidad de sabor.
Asegúrese de que todos los ingredientes del relleno de queso estén a temperatura ambiente para lograr una consistencia suave y cremosa.

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